martes, 16 de septiembre de 2014

Sugerencias para que el derecho al voto sea respetado

¿Por qué nos niegan el derecho al voto?

Todos y todas tenemos derecho a votar. No hay votos de primera y de segunda. No queremos votos calificados. La constitución nacional y la ley de salud mental reconocen que todos tenemos derecho a votar. Sin embargo, en la práctica, no todos ejercemos este derecho en iguales condiciones.

Adentro del hospital, te sacan la realidad. El voto, o la entrada de las urnas al hospital, sería acercarla. Una campaña política podría ser un atisbo de realidad, la vida entrando al hospital.

Queremos que haya gente (operadores estatales, militantes de partidos políticos o integrantes de organizaciones) que vaya a contar sobre el proceso electoral, a informar qué se vota, qué se renueva, quiénes son los candidatos y las propuestas.

Los candidatos de los partidos, podrían también dar discursos en hospitales y fomentar el debate político.

Estas prácticas de acercar información y de dar difusión sobre el proceso electoral, junto a estas campañas electorales que proponemos se desarrollen al interior del hospital, podrían enmarcarse en el ejercicio de la nueva ley de salud mental y de la CDPCD. Así, a partir  de la difusión del derecho al voto, podrían difundirse las leyes y convenciones que lo sustentan y que además incluyen el reconocimiento de otros derechos que la gran mayoría de las personas internadas desconocen.

Todos queremos información clara y precisa sobre el período electoral. Qué se vota, qué cargos se renuevan, quiénes son los candidatos, cuáles son los partidos, qué propuestas y discursos presentan. La información debería ser clara y accesible para todos y debería estar adecuada a las necesidades y posibilidades de quienes la escucharemos.

En todos los hospitales habrá personas que no tengan posibilidad de movilizarse, pero podrían votar ahí mismo, dentro del hospital, y para eso será necesario acercar las urnas a los hospitales.
Para quienes sí puedan ir a votar, habrá quienes puedan hacerlo solos y quienes necesiten de acompañantes terapéuticos o asistentes personales que los acompañen en el momento del voto, del viaje, etc.

En el caso de las personas que están en una institución, debería considerarse como su domicilio el del lugar donde está habitando (y no el domicilio del documento que puede ser en una localidad lejana). Esto podría facilitar el ejercicio del derecho al voto en una escuela cercana a donde se encuentra.  
A todos deberían entregarles su DNI, el que no debería ser retenido.

Se debería rever, como lo fue en otro momento, la disposición de la gratuidad del transporte en el día de las elecciones facilitando la movilización de las personas que deben votar.


Esperamos que estas recomendaciones y sugerencias sean observadas por el bien común de todos.

No hay comentarios: